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El rapto de Europa

Foto del escritor: Jorge MendozaJorge Mendoza

Zeus se transformó en un hermoso toro blanco para seducir a la bella ninfa Europa. La raptó, la condujo a Creta y la hizo suya. Engendraron dos hijos y luego… la dejó.


Parece que este mito griego más bien era una profecía para el siglo XXI y lo estamos viviendo con un poco de angustia y nostalgia. La Unión Europea subyugada ante el poderoso “dios” occidental (Ze-US) sufre las consecuencias de su desconcertante obediencia política y económica.


El político y economista italiano Mario Draghi, expresidente del Banco Central Europeo, en un discurso pronunciado el pasado 14 de junio en el monasterio de San Jerónimo de Yuste, ante altas autoridades de España y de la Unión Europea, presentaba una descripción poco alentadora del desempeño económico de Europa y la necesidad de cambios importantes para enfrentar una nueva realidad geopolítica. Transcribo algunas de sus preocupantes realidades: “Desde principios de la década de 2000, el PIB per cápita (de Europa) ajustado en función de la paridad del poder adquisitivo ha sido aproximadamente un tercio inferior al de Estados Unidos”. Y las cifras así lo corroboran: si comparamos el PIB nominal de Estados Unidos con el de Alemania, Francia e Italia sumados, durante el período 2014 a 2023, vemos que el primero aumentó en un 92%, mientras que el promedio de los europeos lo hizo solo en un 33%. Y Draghi nos dice que una de las principales razones de que este problema se haya profundizado en los últimos dos años, ha sido el alto costo de la energía en Europa: “Los agentes industriales europeos se enfrentan actualmente a una importante desventaja competitiva frente a sus homólogos estadounidenses con unos precios de la electricidad entre 2 y 3 veces superiores” (a los de Estados Unidos). Y sigue: “Estos elevados precios conducen a una menor inversión: el año pasado, alrededor del 60% de las empresas europeas afirmaron que los precios de la energía eran un obstáculo importante para la inversión”. Draghi también nos dice que el elevado precio de la energía incide en una baja importante de la productividad, la innovación y el desarrollo de nuevas tecnologías y especialmente en el avance de la Inteligencia Artificial.


Lo que no menciona Draghi es que el aumento del costo de la energía en el viejo continente se debe, en gran medida, a que el 26 de septiembre del año 2022 se produjo el acto terrorista más salvaje jamás cometido en toda la historia humana a una infraestructura energética: la explosión de los gasoductos Nord Stream 1 y 2 que conducían el abundante y barato gas natural de Rusia a Europa, entrando por Alemania. A mi juicio, este acto será comparado en el futuro con el asesinato del archiduque Francisco Fernando en Sarajevo, a principios de siglo pasado, que desencadenó la primera guerra mundial.


Años de esfuerzo técnico, económico y político estallaron bajo el agua frente a las costas suecas, acabando con uno de los insumos más importantes del desarrollo industrial europeo y principalmente alemán, la energía barata.


¿Y por qué razón “alguien” se atrevería a cometer semejante atrocidad? Obviamente el objetivo era dañar a Rusia abortando de un tajo el ingreso de divisas provenientes de la venta de su gas. Pero claro, este ataque terrorista quedó en “investigación” y por supuesto pasará mucho tiempo antes de conocer los resultados de esas pesquisas. El daño estaba hecho y los efectos negativos que sobrevinieron a los países europeos han sido aterradores en términos económicos y sociales. 


La ira de Zeus no tuvo consideración alguna con las consecuencias de los “daños colaterales” de su acción.


Por otra parte, las sanciones impuestas por Estados Unidos y Europa al comercio y a las finanzas rusas, a raíz de la incursión de tropas rusas en Ucrania, se han devuelto en contra de la población europea, ya que los granos y semillas provenientes del fértil suelo ucraniano han sufrido distorsiones significativas en sus cadenas de suministro y han causado choque con los países periféricos de Europa como Polonia, Hungría, Rumania y Eslovaquia que han visto encarecido el maíz, el trigo y algunas semillas. La inflación se ha disparado.

La pregunta de fondo es ¿y por qué la Unión Europea se pliega tan fervientemente a los ataques contra Rusia, aun sufriendo consecuencias funestas? ¿La lucha hegemónica no era de Estados Unidos contra el “comunismo” ruso, que ya no existe? ¿No fue Rusia el que liberó a Europa de Hitler y venció al ejército napoleónico? ¿Por qué esa fascinación del viejo continente con el poderoso ZeUS? 


La respuesta a mi modo de ver se debe a la conformación misma de la Unión Europea y a su mecánica interna para tomar decisiones. En primer lugar, recordemos que el inicio de esa Unión fue la firma del acuerdo de París en 1.951, creador de la CECA, (Comunidad Europea del Carbón y el Acero) entre Francia, Alemania Occidental, Bélgica, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos, con el propósito de facilitar el intercambio de los insumos necesarios para la producción de grandes cantidades de acero. El objetivo era sustentar especialmente la industria militar, la automovilística y otras, que ya estaban floreciendo en Estados Unidos, y también para la reconstrucción de la destruida Europa después de la guerra. Estados Unidos no formó parte “oficialmente” de las negociaciones del tratado, pero fue una fuerza importante tras bambalinas. Tres personajes intervinieron revisando letra a letra los borradores del acuerdo: 1-John McCloy alto Comisionado de los Estados Unidos para la Alemania Ocupada, 2- El principal asesor en Alemania el abogado de Harvard Robert Bowie y 3- el economista de Harvard Raymond Vernon, quienes tenían como objetivo eliminar el monopolio de la producción de acero en la región alemana del Ruhr, que había sido un bastión muy importante para el ejército Nazi durante la segunda guerra mundial. 


Así pues, se eliminaron los aranceles al carbón y al acero existentes entre los países signatarios del acuerdo y se propiciaron todas las medidas que coadyuvaran a facilitar la producción a gran escala del codiciado metal.


ZeUS omnipresente


La CECA fue tan exitosa que el 25 de marzo de 1.957 sus integrantes firmaron en Roma el tratado que dio origen a la “Comunidad Económica Europea”, para lograr la unión aduanera y un mercado común de libre comercio. Igualmente se firmó el acuerdo para la creación de la Comunidad Europea de la Energía Atómica – EURATOM para regular y controlar las investigaciones y avances sobre la energía nuclear. Ya en 1.992, después de la disolución de la URSS y la caída del muro de Berlín, se dio un paso más decisivo y se firmó el tratado de Maastricht, en los países bajos, para convertir la Comunidad Europea en la “Unión Europea”, con un ámbito de cooperación más profundo que el puro comercial. Se crearon las bases legales para la unión monetaria implementando el “euro” en 1.999 para las transacciones electrónicas entre los países miembros, y en 2001 se imprimieron los primeros billetes de la divisa euro para circulación general de los europeos.


Hoy en día esta unión está integrada por 27 países que conforman un mercado de aproximadamente 450 millones de personas.


Pero miremos un poco el proceso actual de toma de decisiones dentro de la Unión Europea. Sus órganos reguladores son: El Parlamento Europeo, compuesto por 720 diputados, elegidos popularmente por los ciudadanos de los 27 países; El Consejo Europeo, compuesto por los 27 jefes de estado y, La Comisión Europea que es el órgano ejecutivo. Los eurodiputados no actúan independientemente en las votaciones del Parlamento, sino que deben estar adscritos a uno de los 8 partidos políticos preestablecidos. En las elecciones generales del pasado junio, quedaron como mayoría 188 diputados del Partido Popular Europeo, que se proclaman de centro derecha, y con los 136 diputados de la Alianza entre Socialistas y Demócratas obtienen el 45% de las votaciones internas. Así pues, las decisiones del Parlamento están manejadas por esos dos grupos. Por otra parte, La Comisión Europea, es independiente políticamente de El Parlamento y su presidente actúa con total autonomía, supuestamente siguiendo los lineamientos generales dictados por las otras instancias de la Unión. 


En resumen, Úrsula Von der Leyen reelegida como presidente de la Comisión por otro período de 5 años, actúa con un enorme poder sobre los destinos de los europeos, tomando decisiones, como el apoyo irrestricto a Ucrania, incluyendo el envío de armamento y dinero para apoyar al ejército de ese país, la imposición de sanciones a Rusia, y todo lo que los Estados Unidos sugieran para frenar a su archienemigo ruso.


La ninfa secuestrada no se puede oponer a los deseos del poderoso Zeus


Por otra parte, suena como una coincidencia extraña que justo cuando Alemania empezaba a fortalecer su economía basado en el crecimiento industrial, en su capacidad innovadora, su ingenio creador, su disciplina, pero también en el insumo energético barato que venía por el moderno gasoducto ruso y su apertura comercial con China, se agudizaran las presiones de la OTAN contra Rusia, hasta el punto de generar un conflicto en el que inicialmente se enfrentaban dos pueblos eslavos, casi hermanos, y finalmente terminara Europa y especialmente Alemania y Francia arrastrados a una desesperada situación de oposición bélica contra su antiguo aliado.


Creemos que Estados Unidos subestimó el poder armamentístico de Rusia y su alianza con China, y por otro lado, Rusia también subestimo la respuesta de occidente y su brazo armado, la OTAN. Nadie pensó que el conflicto se prolongara tanto (¿tal vez Zeus sí lo sabía?) y que las consecuencias económicas y geopolíticas de las sanciones fueran a afectar tan duramente a la población civil especialmente del “viejo continente”.


Lo que sí es claro es que el conflicto llegó sin solución a una etapa complicada en los Estados Unidos en la que se apresta a tomar el poder por segunda vez el republicano Donald Trump. Por si fuera poco, a la sombra de este “Rapto de Europa” y seguramente aprovechando el desorden mundial, los israelíes aplastan y masacran a los palestinos, atacan a los libaneses y se enfrentan a Irán ante la mirada atónita pero inactiva del mundo entero.


Si, el poder hegemónico del país más poderoso del planeta (Zeus), con el ejército más grande y extendido por el mundo, está declinando ante el ascenso de un oriente impávido sustentado en su historia milenaria. Pero los estertores de la caída son más temibles que su propia fuerza y el estrépito de su negación a la merma de su poder puede arrasar con el que quiera interponerse. Entretanto Europa vive su peor situación en años y ve como se derrumban los bastiones industriales de sus principales países.


CUIDADO, ZEUS SE NIEGA A COMPARTIR EL OLIMPO CON OTROS DIOSES QUE CONSIDERA MENORES.


*Economista, Especialista en Economía Internacional.





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3 Comments


Guest
Feb 04

Parece que Jorge Mendoza , le está diciendo a Latinoamrica que debe hacer ante la arremetida de Donald Tump.

¿Será que debemos retomar el pensamiento Bolivariano de un solo Estado o ir pensando en la Unión Latinoamericana de Naciones?

Unificar comercio, política y moneda.

Todo es viable y hay que deponer los intereses particulares por el bien común.

Todo es posible

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Guest
Feb 05
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Desaortunadamente el momento que vive suramerica es de una gran diferencia de visiones geopolíticas entre los países. No parece posible un acercamiento regional liderado por la Celac o Mercosur o cualquier otra iniciativa integradora. Dentro de cada país suramericano la polarización política es muy alta y no veo a corto plazo la posibilidad de una Union Latinoamericana perdurable.

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Guest
Feb 02

Siempre la mitología griega nos deja perplejos. Muchos de sus mitos interpretan el sentido de los hombres y el capricho de los dioses , hoy los que se han erigido como tales los ZeUS que doblegan a sus dioses menores. Que buen paralelismo utiliza este artículo para explicar de manera sencilla pero detallada el pasado y futuro de la economía global, que según explica ya no lo es. Solo queda el gran ZeUS caprichoso, pedante, megalómano, solo hay que ver el tamaño de su pluma y de su firma en los decretos ejecutivos que expide sin fórmulas de juicio.para el resto de los humanos. Amanecerá y veremos condenados como la metáfora de Sísifo. excelente artículo.

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