El 29 de julio de 2025 es una fecha muy especial. Santa Marta cumplirá, por gracia de Rodrigo de Bastidas, el quinto centenario de su fundación. Alegrías y tristezas.
Santa Marta es la ciudad más antigua del Sur y de Centroamérica. Pero, también, pese a su encantadora antigüedad, hay que decirlo y escribirlo, está muy atrasada en infraestructura, economía y desarrollo.
La ciudad, después de sobrevivir a ataques de piratas, incendios, un terremoto y hasta una peste, ha sido también víctima, en sus cinco centurias, del saqueo por parte de personajes que han engañado, prometiendo sin cumplir.
La población actual vive del comercio informal en más de un 60%, su actividad portuaria ha mermado y su industria sin chimeneas, el turismo, requiere de mejores servicios públicos y un buen aeropuerto para despegar.
Recientemente el ministro de las Culturas, las Artes, y los Saberes Juan David Correa, generó una fuerte polémica a propósito de la conmemoración de los 500 años y afirmar que el gobierno de Gustavo Petro, no destinará recursos porque no hay motivos para celebrar.
"Para nosotros, lo que va a ocurrir no es una celebración", aseguró el ministro Juan David Correa y agregó además que el Gobierno Nacional “no va a celebrar la hispanidad”. Convirtiendo el hecho de la conquista, en un conflicto de civilización, religión e idioma, y por este motivo se excusó de no invertir en el Quinto Centenario.
Las reacciones no se hicieron esperar. El cantante Carlos Vives, defendió la hispanidad, pero su reacción fue tímida, prudente y superficial, y ni siquiera inmutó al ministro.
El alcalde Carlos Pinedo Cuello, publicó en su cuenta de X: “Desde Santa Marta rechazamos con firmeza las desafortunadas declaraciones del ministro de las Culturas, Juan David Correa, quien ha mostrado una grave falta de respeto hacia nuestra ciudad, su historia y su gente. La celebración de los 500 años de Santa Marta no es solo un evento local; es un hito de importancia nacional e internacional. Menospreciar los aspectos históricos de nuestra fundación es una ofensa para los samarios y para todos los colombianos”.
“Es inadmisible que el Ministerio de Cultura, encargado de coordinar esta celebración bajo la Ley 2058 de 2020, esté dirigido por alguien que claramente no respeta ni valora nuestro legado histórico. Exigimos una rectificación, así como un compromiso genuino con la dignidad de nuestra historia y cultura”.
La reunión posterior entre Correa y Pinedo en Santa Marta, no pasó de ser más que un evento simple y protocolario y fue notorio el silencio sepulcral de los gremios samarios como la Academia de Historia del Magdalena, Cotelco, Fenalco, Acodres, el Comité Intergerencial del Magdalena, la Cámara de Comercio de Santa Marta y la misma Universidad del Magdalena.
El gobernador del Magdalena, Rafael Martínez, también hizo mutis en el foro y fue más notorio por el silencio del ex gobernador y ex alcalde, Carlos Caicedo Omar, y de la exalcaldesa Virna Johnson, quienes defendían a capa y espada el Plan Maestro Santa Marta 500 años. Tal vez al perder la alcaldía, se perdió el interés.
A nivel político no pasa nada con el Concejo de Santa Marta ni la Asamblea del Magdalena y mucho menos con los congresistas del departamento: Carlos Farelo, Honorio Henríquez, Kelyn González, Sandra Ramírez, Ingrid Aguirre, Holmes Echeverría y Hernando Guida.
¿Por qué razón no se alzó la voz de protesta contra el ministro Juan David Correa y por qué hoy no se están buscando los recursos para el Quinto Centenario de Santa Marta?. Los presidentes Álvaro Uribe Vélez, Juan Manuel Santos Calderón. Iván Duque y Gustavo Petro, nunca manifestaron interés y mucho menos por asignar recursos para obras que comprenden el Plan Maestro.
Fue necesario, un fallo del Tribunal Administrativo del Magdalena que ordenó 3 días de arresto para el presidente Iván Duque Márquez y de su ministra de Cultura Angélica Mayolo, obligándoles a expedir el decreto 1053 que adoptó el Plan Maestro Quinto Centenario de Santa Marta, con el que la Comisión Preparatoria puso sobre la mesa un total de 25 proyectos que deberán ser implementados y que se encuentran distribuidos en cuatro ejes:
Sostenibilidad ambiental: saneamiento básico y agua potable. Estudio de nuevas fuentes, captación y tratamiento (potabilización) en el corto, medio y largo plazo. Mejoramiento integral de rondas hídricas en Manzanares, Gaira y otras secundarias. Creación de un Parque Lineal y recuperación del rio Manzanares. Gestión de residuos y recuperación de parques naturales, playas y zonas de protección ambiental.
Sostenibilidad económica: Infraestructuras para la competitividad y conectividad. Modernización y ampliación del aeropuerto internacional Simón Bolívar. Centro empresarial y de servicios logísticos. Habilitación del muelle y servicios para el atraque de cruceros y transporte de pasajeros, incluida la vía férrea para carga y pasajeros. Además de rehabilitación del centro histórico, corredor turístico de Pozos Colorados, proyectos agrarios, centro de fomento artesanal. Sistema de Transporte Público y construcción de una nueva terminal de transporte.
Sostenibilidad social: construcción del nuevo estadio de fútbol y recuperación de la Villa Bolivariana. Fortalecimiento del capital humano. Mejoramiento de colegios y escuelas públicas urbanas y rurales. Creación de la Universidad Politécnica. Consolidación del Centro Cultural Bolivariano (Quinta de San Pedro Alejandrino). Desarrollo urbano del área de expansión con proyectos de vivienda VIS y VIP.
Sostenibilidad institucional. Fundación Santa Marta Quinto Centenario. Fundación Pro Santa Marta.
Hasta el son de hoy, todavía se está a la espera de los resultados que deben arrojar la mesa técnica conformada por los Gobierno Distrital, Departamental y Nacional que permita avanzar en los resultados de estos proyectos.
En las cátedras recientes promovidas por la Secretaría de Cultura distrital “Soy Samario Calidad”, el común denominador de panelistas y asistentes, es de recobrar la memoria histórica de la ciudad para identificar e impulsar nuestros valores.
Se está pidiendo a cuatro voces que se les cumpla a los samarios y al país con las verdaderas obras del Plan Maestro; que, de una vez por todas, se aparte la polarización política y los intereses politiqueros que han gobernado por décadas.
Se requiere un punto de encuentro para aunar esfuerzos, pensamientos, criterios y voluntades por Santa Marta; en donde el poder legislativo y el ejecutivo, trabajen con los gremios y la sociedad para ubicar a Santa Marta como una de las primeras ciudades en el contexto nacional e internacional con calidad de vida.
De no ocurrir, “la visión de 2025, principales retos y desafíos”, no pasará de ser letra muerta; en tanto que los samarios seguiremos soñando con la Ciudad Dos Veces Santa, La Magia de Tenerlo Todo, y, en todo caso, con un futuro incierto.
Comunicador Social y Periodista. Teólogo e investigador. Autor de “Santa Marta 500 Años” y “Un Nuevo Nacimiento”. Director de azradio.com.co y aznoticias.com.co.
Si, no es justo que por una discusión anacrónica se afecten los proyectos de mejoramiento de Santa Marta